Undécimo


Las voces narrativas en la dimensión comunicativa
Dentro de la dimensión comunicativa, uno de los elementos característicos del texto narrativo es la presencia de voces narrativas. La voz indica cómo se expresa la información (diálogos, descripciones, pensamientos) por me­dio de un narrador que puede presentarla e interpretarla o por medio de un personaje. Se reconocen seis clases de voces narrativas:
a.  El narrador cuenta unos hechos.
b.  El narrador cuenta que un personaje habló, pero no especifica qué
dijo.
c.  El narrador cuenta con sus palabras qué dijo un personaje.
d.  El narrador presenta de manera literal las palabras de un personaje.
e.  El personaje habla directamente, sin aparición del narrador.
f.   El personaje expresa sus pensamientos sin intervención del narrador.
Es usual que en el desarrollo de la narración concurran diversas voces, que se ponen de manifiesto por la forma de utilizar el lenguaje.



Análisis de las voces narrativas
Habla el narrador. -
El narrador no pre­cisa qué dijo el per-, sonaje.
El narrador pre­senta las palabras -textuales de la mu­chacha.
El narrador presen- -ta con sus palabras una afirmación de la muchacha.
El narrador cuenta-con sus palabras lo que dijo "Él".
Habla el narrador.-


La pensión
Estaba sentado al borde de la cama, en camisa y pantalo­nes, inerme ante la fatalidad que lo abrumaba, cuando ella dio unos golpecitos en su puerta y entró en la habita­ción. La muchacha se lo dijo todo, que había confesado los hechos a su madre desde la A hasta la Z, y que su madre hablaría con él esa misma mañana. Rompió a llo­rar y le echó los brazos al cuello, diciendo:
-¡Oh, Bob! ¡Bob! ¿Qué voy a hacer? ¿Qué voy a hacer? r Terminaría de una vez con su existencia, dijo.
Él la consoló débilmente, diciéndole que no llorara, que todo se arreglaría, que no había que temer. Sintió la agitación del pecho femenino contra su camisa.
No fue del todo culpa suya que el hecho sucediera. Recor­daba, con la singular y paciente memoria del soltero, los primeros roces fortuitos de su vestido, su aliento, sus de­dos, que habían sido como caricias para él.
james joyce


Identifica las voces narrativas en una novela
Durante la lectura debes reconocer las diferentes voces narrativas que em­plea el autor, puesto que es uno de los elementos de la dimensión comuni­cativa esencial para la interpretación de textos narrativos.


Actividad 2          Identifica elementos de la dimensión comunicativa
1. ¿Quién es el narra­dor de los hechos?
a.  El vizconde
b. El sobrino del viz­
conde.
2. Indica en qué tiem­po cuenta los hechos el narrador según los verbos resaltados.
Infiere
3. ¿Cómo supo el viz­conde que el vuelo de las cigüeñas era de buena suerte?


Actividad 3: Observa las imágenes que acompañan el relato y deduce de qué trata.
El vizconde demediado
Había una guerra contra los turcos. El vizconde Medardo de Terralba, mi tío, cabalgaba por la llanura de Bohemia camino del campamento de los cristianos. Lo seguía un escudero llamado Curzio. Las cigüeñas volaban bajas, en blancas bandadas, cruzando el aire opaco y quieto.
-¿Por qué tantas cigüeñas? -preguntó Medardo a Curzio-, ¿adonde vuelan?
Mi tío estaba recién llegado, habiéndose enrolado hacía muy poco, por com­placer a ciertos duques vecinos nuestros metidos en aquella guerra. Se había provisto de un caballo y un escudero en el último castillo en manos cristianas, e iba a presentarse al cuartel imperial.
-Vuelan a los campos de batalla -dijo el escudero, tétrico-. Nos acompañarán durante todo el camino.
Al vizconde Medardo le habían dicho que en aquellas tierras el vuelo de las cigüeñas es señal de buena suerte; y quería mostrarse alegre al verlas. Pero se sentía, a su pesar, inquieto.
-¿Y qué puede atraer a las zancudas a los campos de batalla, Curzio? -pre­guntó.
-También ellas comen carne humana ya -respondió el escudero-, desde que la carestía ha agotado la campiña y la sequía ha secado los ríos. Donde hay cadáveres, las cigüeñas y los flamencos y las grullas han sustituido a los cuervos y los buitres.


Mi tío estaba aún en la primera juventud; la edad en que los sentimientos se mezclan todos en un confuso impulso, indistintos aún entre mal y bien; la edad en que toda nueva experiencia, por macabra e inhumana que sea, es trémula y cálida de amor a la vida.
.-¿Y los cuervos? ¿Y los buitres? -preguntó-. ¿Y las otras aves rapaces? ¿Dón­de se han ido? -estaba pálido, pero sus ojos centelleaban.
El escudero era un soldado negruzco, bigotudo, que nunca alzaba la mirada.
-A fuerza de comerse a los muertos de peste, la peste les ha dado también -e indicó con la lanza unos negros matojos, que a una mirada más atenta se revelaban no de hojarasca, sino de plumas y resecas patas de rapaz.
Ya el terreno estaba sembrado de signos de ocurridas batallas. La marcha se había hecho más lenta porque los dos caballos se resistían, saltando y enca­britándose.
-¿Qué les pasa a nuestros caballos? -preguntó Medardo al escudero.
-Señor -respondió él-, nada disgusta tanto a los caballos como el olor de sus propias tripas.
La franja de llanura que estaban atravesando se encontraba cubierta de cadá­veres equinos, algunos patas arriba, con los cascos al cielo, otros boca abajo, con el hocico hundido en la tierra.
-¿Por qué tantos caballos caídos en este punto, Curzio? -preguntó Medardo.
-Cuando el caballo nota que está destripado -explicó Curzio- intenta retener sus visceras. Algunos colocan la barriga en el suelo, otros se tumban sobre el lomo para que no les cuelguen. Pero la muerte no tarda en llegarles igual.
-¿De modo que los que mueren en esta guerra son sobre todo los caballos?
-Las cimitarras turcas parecen hechas aposta para hendir de un tajo sus vientres. Más adelante verá los cuerpos de los hombres. Primero les toca a los caballos y luego a los jinetes. Pero el campamento ya está ahí.


Identifica elementos de la dimensión comunicativa
4. ¿Quién explica que el
vizconde era joven
en ese momento?
a.  El escudero del
vizconde.
b. El sobrino del viz­
conde.
Relaciona hechos
5, A partir de lo dicho
sobre las aves, expli­
ca la situaci
ón de la
guerra.
Identifica detalles
 6. ¿Qué ocurría con los   caballos durante las  batallas?


Actividad
Identifica elementos narrativos
7* Las palabras del cen­tinela son:
a.  Una interpretación
del narrador
b. Exactamente las
que
él pronuncia.
Identifica detalles
A ¿Cómo estaba cons­tituido el ejército im­perial?


Al borde del horizonte se alzaban los pináculos de las tiendas más altas, y los estandartes del ejército imperial, y el humo.
-¿Quién va? -dijo un centinela de capote cubierto de moho y musgo, como la corteza de un árbol expuesto al cierzo.
-¡Viva la sagrada corona imperial! -gritó Curzio.
-¡Y muera el sultán! -replicó el centinela-. Pero, os lo ruego, lle­gados al mando decidles que cuándo se deciden a mandarme el relevo, ¡que estoy echando raíces!
Los caballos corrían ahora para escapar de la nube de moscas que circundaba el campo, zumbando sobre las montañas de ex­crementos.
-El estiércol de ayer de muchos valientes -observó Curzio- aún está en el suelo, y ellos ya están en el cielo -y se santiguó.
Pasaron ante las baterías de campo. Por la noche, los artilleros hervían su rancho de agua y nabos en el bronce de las espingardas y de los cañones, al rojo tras los muchos disparos del día.
Después venían las cuadras de la caballería, donde entre moscas, los veteri­narios, siempre manos a la obra, remendaban la piel de los cuadrúpedos con cosidos, cinchas y emplastos de alquitrán hirviendo, todos relinchando y co­ceando, incluso los doctores.
Los acampamentos de la infantería seguían luego por un gran trecho. Era el ocaso, y ante cada tienda estaban sentados los soldados con los pies descalzos metidos en tinajas de agua tibia. (...)
El vizconde de Terralba fue llevado de inmediato a presencia del emperador. En su pabellón, todo tapices y trofeos, el soberano estudiaba en cartas geo­gráficas los planes de futuras batallas. Las mesas estaban atestadas de mapas desplegados y el emperador clavaba en ellos alfileres, cogiéndolos de un ace­rico que uno de los mariscales le tendía. Los mapas estaban ya tan cargados de alfileres que no se entendía nada, y para leer algo había que quitar los alfileres y luego volverlos a poner. Con tanto quita y pon, para tener las manos libres, lo mismo el emperador que los mariscales tenían alfileres entre los labios y sólo podían hablar con gruñidos.
Al ver al joven que se inclinaba ante él, el soberano emitió un gruñido inte­rrogativo y se sacó al punto los alfileres de la boca.
-Un caballero recién llegado de Italia, majestad -lo presentaron-, el vizcon­de de Terralba, de una de las más nobles familias del Genovesado.
-Nómbresele de inmediato teniente.
Mi tío hizo chocar las espuelas en posición de firmes, mientras el emperador hacía un amplio gesto real y todas las cartas geográficas se enrollaban sobre sí mismas y rodaban por el suelo.
ítalo calvino. el vizconde demediado. barcelona: ed. círculo de lectores, 1995. (adaptación)



Actividad  Verifica tu comprensión
Identifica elementos de la dimensión estructural
7.  ¿Cómo inicia la narración?
Z, ¿Cómo se desarrollan los hechos?
3.  ¿De qué manera finaliza el capítulo leído?
Identifica elementos de la dimensión comunicativa
4.  Identifica la situación del narrador en el capítulo leído. Escoge la opción correcta
y sustenta tu respuesta.
a.   El narrador hace parte de los hechos relatados.
b.  El narrador sólo cuenta hechos en los que no participa.
5.  Identifica las voces narrativas del texto, de modo que relaciones, en el siguiente
cuadro, la voz narrativa con el ejemplo correspondiente.


Voz narrativa


Ejemplos





a.   El narrador cuenta unos hechos.
b.   El narrador cuenta lo que un per­
sonaje dijo sin especificarlo.
c  El narrador cuenta con sus pala­bras lo que dijo el personaje.
d  El narrador presenta de manera textual las palabras del personaje.
e  El personaje habla en forma directa.


-¿De modo que los que mue­ren en esta guerra son sobre todo caballos?
__ Al ver al joven..., el soberano emitió un gruñido interrogativo.
__ El escudero era un soldado ne­gruzco.
    __ Al vizconde Medardo le habían dicho que...
 __-¿Qué les pasa a nuestros ca­ballos? -preguntó Medardo al escudero.



Analiza elementos de la dimensión pragmática
6.          Aunque la narración se desarrolla en un contexto histórico medieval, ¿conside­ras que los temas tratados tienen relación con la actualidad?
7.          ¿Qué opinas de la figura del emperador y sus mapas?, ¿te sugiere alguna interpretación simbólica? Explica tu respuesta.
Analiza el lenguaje narrativo
8.  Explica por qué, cuando habla el narrador los verbos se conjugan en pasado;
mientras que cuando habla un personaje, est
án conjugados en presente,
“Los seguía un escudero llamado Curzio. Las cigüeñas volaban bajas, en blancas bandadas, cruzando el aire opaco y quieto.
-¿Porqué tantas cigüeñas-preguntó Medardo a Curzio, ¿adónde vuelan?”


El narrador en la dimensión comunicativa
Dentro de la dimensión comunicativa, además de la voz narrativa, es funda­mental el narrador. El narrador es el sujeto que cumple la función de descri­bir el espacio, los personajes, el desarrollo del tiempo y de las acciones. Se reconocen tres clases de narrador, según su participación en la historia.
a.   Narrador que comenta la historia de otro. Utiliza la tercera persona
gramatical (
él, ella...).
b.  Narrador que cuenta la historia dirigiéndose a un personaje del relato
o al lector. Utiliza la segunda persona gramatical (tú, usted...).
c.   Narrador que cuenta una historia en la que participa como protago­
nista. Utiliza la primera persona (yo...).
En las narraciones biográficas se utiliza la tercera persona; en las autobio­grafías, la primera persona.


Análisis de la autobiografía
Conjugación verbal en primera persona.
Detalles sobre su lu­gar de nacimiento.
Detalles sobre sus padres y su infancia.
Detalles sobre su modo de ser.


El Pabellón de Oro
Desde mi más tierna infancia, mi padre, muchas veces, me habló del Pabe­llón de Oro.
Nací al noroeste de Maizuru, en un promontorio solitario que penetra como una cuña en el mar del Japón. Mi padre no era de allí, sino de Shiraku, las afueras al este de Maizuru. Cediendo a vivas instancias, mi padre abrazó el estado del clérigo y, siendo ya monje, fue encargado de un templo situado sobre una colina perdida. Allí se casó y su mujer le dio un hijo -que soy yo.
En la cercana aldea del Cabo Nariu no había ningún colegio a propósito para mí, y muy pronto llegó el momento de abandonar el hogar. Me acogió un tío mío, en el país de mi padre, y todos los días recorría a pie el trayecto entre su casa y el colegio del barrio Este de Maizuru.
El país natal de mi padre era una tierra inundada de luz. Sin embargo, todos los años, hacia noviembre o diciembre, incluso en días que amanecían bajo un cielo puro y sin nubes, caían de pronto cuatro o cinco aguaceros. De ahí que mi corazón, mi inestable corazón, sea como esta tierra que le vio crecer.
yukio mishima, 1956.








Identifica el narrador en una biografía
La biografía es un género literario o histórico en el que se narra la vida de una persona real o ficticia. Para su interpretación es necesario identificar los elementos que conforman las distintas dimensiones del texto narrativo.
Actividad       Activa tus conocimientos
1. ¿Qué detalles tendrías en cuenta para narrar la vida de un personaje ficticio?
2. Lee a continuación un fragmento de la novela Orlando, una biografía, en la que se cuenta la vida de un joven aristócrata que primero es hombre y luego mujer en un periodo de varios siglos.
Orlando, una biografía
Capítulo 2
El biógrafo se enfrenta ahora con una dificultad que quizás es mejor confesar que encubrir. Hasta este punto del relato de la vida de Orlando, los docu­mentos, tanto privados como históricos, han hecho posible el cumplimiento del primer deber de todo biógrafo, deber que consiste en avanzar con cuida­do, sin mirar a izquierda o a derecha, tras las indelebles huellas de la verdad; indiferente a las flores; insensible a las sombras; avanzando y avanzando metódicamente hasta caer en la tumba y escribir finís en la lápida situada encima de nuestras cabezas. Pero ahora viene un episodio que se atraviesa en nuestro camino, de modo que no podemos ignorarlo. Encima es oscuro, misterioso y no está documentado; por lo que carece de explicación. Podrían escribirse volúmenes enteros para interpretarlo; podrían fundarse sistemas religiosos completos sobre su significado. Nuestro simple deber es hacer cons­tar los hechos hasta donde son conocidos, y dejar que el lector haga con ellos lo que quiera.
En el verano que siguió a la Gran Helada, Orlando fue desterrado de la corte; o en desgracia ante los nobles más poderosos de su tiempo. En aquel verano, pues, Orlando se retiró al campo, a su gran casa, y allí vivió en com­pleta soledad.
                             Actividad         Identifica elementos de la dimensión comunicativa
1. ¿Quién relata los he­chos?
a.  El biógrafo.
b. Un narrador que
observa al bi
ógrafo.
2. ¿Cuándo ocurren los hechos y dónde su­ceden?
Infiere
3. ¿Por qué crees que el narrador hace un preámbulo antes de empezar a contar la vida de Orlando?


Actividad              Identifica información relevante
4.   ¿Qué suceso de la
vida de Orlando nos
cuenta el narrador?
5.   ¿Qué efectos tuvo
sobre Orlando el
periodo de sueño?
Infiere
6.    ¿Por qué es impor­
tante la Gran Hela­
da dentro del texto?
Identifica detalles
7.    ¿Qué hicieron los
médicos?

Una mañana de junio -era el sábado 18-, no se levan­tó a su hora habitual y cuando su ayuda de cámara fue a llamarlo lo encontró profundamente dormido. No pudieron despertarlo.
Yacía como en trance, sin respiración perceptible; y aunque apostaron perros bajo su ventana para que ladraran; tocaron constantemente en su habitación címbalos, tambores y crótalos; colocaron bajo su al­mohada una ramita de aulaga; y aplicaron a sus pies emplastos de mostaza, ni así se despertó, comió, o dio señales de vida durante siete días enteros.
Al séptimo día se despertó a su hora de costumbre (las ocho menos cuarto) y echó de su cuarto a toda la patulea de comadres chillonas y de curanderas pueblerinas; lo que era más que natural; pero lo ex­traño fue que mostró no tener conciencia alguna de aquel trance, sino que se vistió él solo y envió por su caballo como si de despertara tras una sola y plácida noche.
Con todo, algún cambio -se sospechaba- había teni­do lugar en las cámaras de su cerebro, porque, aun­que se mostraba perfectamente sensato y parecía de talante más grave y reposado que antes, demostraba tener un recuerdo imperfecto de su vida pasada.
Cuando la gente hablaba de la Gran Helada o del patinaje o del carnaval, prestaba atención, pero nunca daba señales, salvo por el hecho de pasarse la mano por la frente, como para alejar alguna nube, de haberlos presenciado en persona.
Cuando se discutían los acontecimientos de los últimos seis meses, él no parecía afligido tanto como desconcertado, como si le preocuparan confusos recuerdos ocurridos largo tiempo atrás o estuviera tratando de evocar histo­rias que algún otro le hubiera contado.
Se observó que si se hacía mención de Rusia o de princesas o de barcos, él se sumía en una especie de melancolía, y se levantaba y miraba por la ventana o llamaba a uno de sus perros, o cogía su navaja y tallaba un trozo de madera de cedro. Pero en aquella época los médicos apenas eran más sabios que hoy, y tras prescribirle reposo y ejercicio, ayuno y sobrealimentación, compañía y soledad, y que permaneciera echado todo el día y que cabalgara cuarenta millas entre la comida y la cena, junto con los acostumbrados sedativos y excitantes, alternándolos, según capricho de los médicos, con pócimas de baba de tritón al levantarse y tragos de hiél de pavo real al irse a la cama, lo abandonaron a sí mismo y dijeron que en su opinión había dormido una semana.
virginia woolf. orlando. barcelona: ed. lumen, 1994. (adaptación)


Actividad    Verifica tu comprensión
Identifica elementos de la dimensión estructural
1.   Reconstruye los elementos del texto narrativo.
Personaje central


Interpreta
2.  Explica cuál es el hecho referido en la siguiente oración del primer párrafo.
'Viene un episodio que se atraviesa en nuestro camino... es oscuro, miste­rioso y no está documentado; por lo que carece de explicación".
Identifica elementos de la dimensión comunicativa
J. ¿La voz narrativa cambia a lo largo del texto? Justifica tu respuesta.
4. 

Interpreta
2.  Explica cuál es el hecho referido en la siguiente oración del primer párrafo.
'Viene un episodio que se atraviesa en nuestro camino... es oscuro, miste­rioso y no está documentado; por lo que carece de explicación".
Identifica elementos de la dimensión comunicativa
3. ¿La voz narrativa cambia a lo largo del texto? Justifica tu respuesta.
4.  Explica por qué el narrador se presenta en primera persona del
plural (nosotros):
     Se atraviesa en nuestro camino...
     Nuestro simple deber es...
Identifica el lenguaje narrativo
5.  ¿Por qué cuando el narrador se refiere a sí mismo conjuga los verbos en presente,
mientras que cuando relata los hechos emplea el pasado? Observa:
     ahora viene un episodio que se atraviesa en nuestro camino...
     no podemos ignorarlo...
     nuestro simple deber es...
     Orlando fue desterrado...
     no pudieron despertarlo...






Analiza elementos de la dimensión pragmática
6.  Identifica cuál es el objetivo del narrador:
a.   Convencer al lector de la veracidad de los hechos.
b.  Interpretar los hechos para el lector
c.   Dejar que el lector haga lo que quiera con la información.
d.  Analizar los escritos del biógrafo.
Haz una lectura crítica
7.  Identifica la crítica que se hace a los médicos y analiza si esta
opini
ón aún tiene validez.


Lecturas recomendadas




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iedjuliocesarsanchez.blogspot.com

1 comentario:

Anónimo dijo...

señores docentes del colegio julio cesar les informo que la señorita ingrid prieto rodrigez de grado decimo. me robo algo muyy importante del colegio que estudio ella porfavor imformale a ella que me lo regrese y pronto o no se que voy hacer gracias por todo ....
att clgm